Presentación

Quiero compartir mis reflexiones e ideas sobre el futuro de la sociedad


lunes, 25 de noviembre de 2013

Lo Hacker



Yo me considero un hacker. ¿Pero qué es ser hacker o pensar como un hacker?
Cada vez estoy más convencido que muchas cosas y conceptos diversos sobres los cuales no todos los hackers estarán de acuerdo, o matizarán, o terminarán hackeando. Para mí, la esencia más pura del pensamiento hacker la destiló Himanen, mediante la expresión de una ética de valores, de la cual se pueden desprender actuaciones en otros ámbitos de la vida. Pero incluso cierta terminología que utiliza puede resultar de interpretación ambigua. Himanen utiliza el término hackerismo, para designar el “espíritu alternativo que cuestione la ética protestante”. También yo he utilizado en mis escritos el término hackerismo,  si bien actualmene la considero inadecuada.  El sufijo –ismo se utiliza habitualmente para designar una doctrina o ideología, pero el pensamiento hacker propone más bien una cosmovisión, una forma de pensar y actuar ante la vida con libertad y pasión creativa, reinventando el mundo.

Mc Kenzie Wark desde una perspectiva criptomaxista habla de clase hacker para denominar a las personas creadoras de abstracción. Pero como el mismo Wark reconoce, la descripción del fenómeno hacker no puede ser completa porque es diversa. No es un estamento monolítico, sino nodos de una red, constantemente reconfigurada. Por todo ello, no es clasificable y no es aceptable compararlo con ideologías diversas.

Por eso yo propongo utilizar a partir de ahora la denominación “Lo hacker” para describir la  interpretación de aquellas maneras comunes a los hackers. Y como para ser hacker, hay que desaprender continuamente, también espero equivocarme en los análisis que pueda hacer de Lo Hacker. Otros hackers opinarán y darán su propia versión.

Presento algunas interpretaciones de los que, para mí es la naturaleza de “Lo hacker”. En próximas entradas completaré esta visión.
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Lo hacker es multiverso. Existen tantas realidades como nodos de la red. Lo hacker es un nodo o nodos de una red, diversos y con interfaces sobre otras redes. Lo hacker nunca es una clase.. No es un estamento monolítico. Si Lo hacker fuese una clase, sería una clase “abstract”. Cómo el mismo Wark reconoce al asociar la abstracción a Lo hacker. Una clase abstracta declara métodos, pero no tiene que implementarlos. Un hacker hereda bases, valores, pero requiere de su propia especificación. Lo hacker es siempre una descripción incompleta. El hacker es un individuo único con interfaces fuertes y débiles a sus comunidades/nodos.

Lo hacker es red. Lo hacker parte de una decisión individual, pero rara vez se obtendrá un hackeo efectivo y sustancial si no se genera una comunidad en red que lo soporte. El nodo y la comunidad-red en que el hacker deposita su confianza y su acción, son el verdadero promotor del hackeo. Sin el trabajo en red, sólo existe excentricidad individual. Las comunidades pre-hacker con redes débiles, no permitían el feedback y ni el avance sobre las bases ya trabajadas, con lo que obligaban a una constante reformulación. Además, las comunidades no abiertas, producían formulaciones escolásticas y/o esotéricas. Lo hacker crece y se convierten en cosmovisión dominante cuando la red es abierta, instantánea y de conexión constante y global. Por eso, solo el informacionalismo ha extendido y concretado la implementación hacker en casi todos los ámbitos de la vida.

viernes, 8 de noviembre de 2013

Educación para la ciudadanía


Este era el título de una polémica asignatura, cuyo objetivo era educar para ser “buen ciudadano”. En este artículo voy a reivindicar la necesidad de más educación para toda la ciudadanía, en otra perspectiva educativa, más amplia y acorde con los tiempos.
Hagamos un breve análisis de la situación socioeconómica en España, destacando algunos puntos claves:

Con esta perspectiva, parece claro que el modelo productivo y la cualificación educacional no están acordes ni son compatibles. En este sentido, el consenso de los expertos es amplio.

Como salida de la crisis, muchos abogan por la necesidad de  incrementar el emprendimiento y la innovación en las empresas, y en toda la sociedad. Yo estoy de acuerdo con ambas posturas, porque como he indicado en otros posts, son dos actitudes acordes con los valores hacker de  libertad, pasión y creatividad. Pero para conseguir ese cambio de actitud en la sociedad, primero se debe desear colectivamente, (es más efectivo tratar de conseguir algo porque se quiere, no porque se debe). Y para ello no existe ningún driver mejor que la educación, tanto para abrir nuevos horizontes en las mentes, como para adquirir la capacitación necesaria modificar el comportamiento de la sociedad.

Es unánime que la educación de nuestros niños y jóvenes debe mejorarse. Y eso debe realizarse a través de una ley de educación dónde se escuche a los expertos, y se incorporen las mejores prácticas de otros países con éxito probado. Pero olvídense de LOGSES y LOMCES… En el mundo actual, de cambios vertiginosos y con una sociedad de millones de excluidos laborales, la educación debe ser continua y de acuerdo a la que el ciudadano demande durante toda la vida. ¡¡La educación debe ser para la ciudadanía!!. Las personas tenemos derecho a reinventarnos si lo deseamos, sin estar sometidos y encasillados en una vida que no nos apasiona. Por eso, desde las instituciones deben facilitarse los medios para que todos podamos conseguirlo, en función de nuestras capacidades.

Además de la formación de base, hay que incrementar y mejorar otros dos aspectos educativos:
  • La formación profesional.
  • La educación de adultos.

La formación profesional.

Y me refiero aquí a la formación durante y para el ejercicio de una profesión, no a los planes educativos. Las políticas de formación profesional están ejecutadas por la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo. Esto hace, que los cursos y objetivos educacionales sean marcados por sindicatos y empresarios, pero en contadas ocasiones se cuenta con el trabajador, sus intereses y/o necesidades.  Así han surgido distintos escándalos de desvío de fondos  y contratación de “amiguetes” para realizar la formación en las empresas. El fracaso de dichas políticas es evidente ante la situación de  descompensación entre las necesidades laborales y las capacidades adquiridas por los trabajadores.

Para mejorar la situación  se deberían tener en cuenta los siguientes aspectos:
  • La implicación de los ciudadanos en la definición de los programas. Son las personas quienes deben adquirir los conocimientos, y por tanto los que mejor conocen sus propias necesidades.
  • El balance de la oferta formativa entre las necesidades empresariales y las perspectivas de evolución del modelo productivo. Es decir, se debe ofertar para cubrir necesidades actuales y futuras.
  • La implicación de expertos de distintas áreas para la creación de una formación profesional multidisciplinar.
  • El incremento de formación en conocimientos de gestión y habilidades directivas. Porque el cambio de modelo productivo y un aumento del emprendimiento requiere de conocimientos (planificación, contabilidad, marketing,…) y de habilidades (gestión del riesgo, de equipos humanos,…), que van más allá de las capacidades técnicas.
  • Ligar la formación a desempleados con periodos de formación en empresas, adecuadamente remunerados.
  • Dotar a los trabajadores de un fondo propio de formación (tanto con dotación económica como temporal en horas/año) para su libre disposición, de forma que la utilicen según sus necesidades e intereses. 
Fondos dedicados a Formación profesional para empleo en 2012
 
La educación de adultos.
Pero la educación de los ciudadanos no puede quedarse en el ámbito puramente profesional. Primero, porque una sociedad sana debe ser una sociedad educada y con criterio, lo que conlleva un continuo aprendizaje. Las tecnologías y los cambios vertiginosos de la sociedad obligan a un continuo reciclaje, a una reinvención de formas de ver y actuar ante el mundo. La era de la información ha dejado aparcados a muchas personas, que no han adquirido ni siquiera el rango de “inmigrantes digital”.  Pero además, muchos ciudadanos no han recibido la adecuada formación en su etapa  formal, ni esta estaba orientada a la interactuación con la sociedad. ¡¡A cuantos nos hubiese facilitado la vida un reciclaje en Derecho o Economía para hablar con Bancos, con la Administración o para hacer la declaración del IRPF!!. Incluso aunque algunas de estas capacidades formasen parte de los planes de formación, deberíamos tener mecanismos para adaptarnos a nuevos cambios.
Pero además, la ciudadanía debería tener la facilidad de ampliar sus conocimientos, de reinventarse, de emprender nuevos caminos que le permitan vislumbrar un horizonte distinto. Eso es lo que permite evolucionar a la sociedad y un progreso real de sus ciudadanos. Solo la riqueza espiritual que aporta una educación total, puede abrir paso a nuevas formas de riqueza material, socialmente equitativa y sostenible.
Por todo ello, reivindico una educación integral, continuada, y de fácil acceso por parte del ciudadano. Es decir, más que educación, necesitamos un acceso libre al conocimiento, demandado de abajo hacia arriba, desde el ciudadano al Estado y no al contrario.  Porque sólo así nos libraremos de viejos esquemas mentales y seremos capaces de encontrar soluciones a los nuevos retos que se avecinan.