Presentación

Quiero compartir mis reflexiones e ideas sobre el futuro de la sociedad


viernes, 4 de julio de 2014

Colaborar vs compartir

Ni la crisis ha terminado, ni su fin va a ser como la mayoría esperan, pues de hecho nuestro futuro estará marcado por la incertidumbre. Si buscamos una característica en esta nueva era de la humanidad será básicamente eso…humanista. Y no porque un ideal utópico recorra el mundo, si no porque el nivel de desarrollismo que ha logrado la humanidad comienza a poner en peligro la propia existencia de la especie. La sociedad tendrá que volcarse en  nuevos valores que hagan sostenible el desarrollo de las personas, en un mundo tecnificado e hiper-explotado. Todo ello coloca a la ética hacker como una herramienta válida  para un uso pragmático en la búsqueda de soluciones.

Todas las ideologías, más o menos utópicas, han abogado por mejorar tanto el ámbito  individual como el social de la humanidad. Pero para su consecución  establecen una serie de conductas o actuaciones predeterminadas. Lo hacker incide en el bien común desde el individualismo libertario y sin más imposición que su propia ética de valores. No existen modelos vehiculares de lo “políticamente correcto”. No hay una familia modelo, ni una empresa modelo, ni ninguna institución o relación “correcta”. De hecho es la diversidad lo que enriquece el desarrollo individual y social. Esta ausencia del modelo correcto es lo que erradica la imposición sobre el diferente. Pero por contra dificulta la planificación de proyectos de sociedad al existir tantas prioridades como comunidades. La representatividad deja de ser un valor sólido, concluyendo que cada cual se representa a sí mismo. 
Así, el humanismo hacker solo puede basarse en unos pocos valores comunes, sobre los cuales construir una sociedad libre, de sano respeto y ausencia de coacción. Es una ampliación globalizada del concepto de humanismo,  con las personas y su entorno colaborando en la construcción de lo común.
Al contrario que otras formas de pensamiento, lo hacker, se basa en colaborar (trabajar en conjunto) más que en compartir (repartir). Viejas ideologías han basado la justicia social en compartir  la riqueza de forma igualitaria, o en compartir las sobras de forma caritativa. Ambas formas de repartición son injustas en cuanto a su falta de equidad o fomento de la desigualdad.
La única forma justa de aportación a la riqueza común es colaborando de forma corresponsable en el bien común.

La ejecución de un hackeo se basa en colaborar para su consecución, mostrar sus resultados abiertamente y ofrecerlos a la comunidad.